Día del Niño: “El tiempo como regalo”

El pasado domingo 16 de Agosto se conmemoró en nuestro país el Día del Niño, una fecha cuyo objetivo principal radica en promover el bienestar y los derechos de los niños, contribuyendo a generar vínculos afectivos saludables.

Muchos estaremos pensando qué podemos regalarles en esta fecha especial, y quizás dejamos pasar por alto el regalo más importante: el tiempo que podemos compartir con ellos.

Una buena propuesta para aprovechar el tiempo compartido con los niños, es generar con ellos un espacio de lectura.

Recomendaciones para el “espacio de lectura”

• Buscar momentos adecuados, en donde podamos dedicarnos exclusivamente a leer, conectarnos y escucharnos.
• Generar un hábito de lectura compartida, ya sea semanalmente, diariamente o la mayor cantidad de veces posible.
• Elegir qué leerles cuando son demasiado pequeños y ayudarlos en la elección cuando ya pueden hacerlo por sí mismos.
• Si no hay libros en casa o una biblioteca cercana, un lindo desafío es poner en juego nuestra imaginación inventando cuentos juntos. Crear personajes, lugares, momentos, y hasta armar los libros con dibujos propios de nuestros niños, resultan aventuras inolvidables.

Sugerencias de acuerdo a las edades

• 1 a 2 años: se recomiendan libros con muchas imágenes, grandes y con distintos colores.
• 3 a 4 años: los niños gustan más de las repeticiones, rimas y canciones.
• 5 a 7 años: al comenzar la escuela, su mundo se amplía más allá del entorno familiar. Se recomiendan libros en los que las imágenes estén relacionadas con lo que se lee, para que les resulte entretenido.
• 8 a 9 años: ya empiezan a realizar sus propias lecturas, resulta importante ayudarlos y escucharlos en el proceso.
• 10 a 12 años: se interesan por libros con más texto, como pueden ser novelas cortas infantiles, fábulas, historietas.
• A partir de 12 años: entran en una etapa de complicidad con pares, por lo cual lo mejor son las aventuras.

Es importante permitir que los niños elijan libros de su agrado, acompañándolos en el camino de sus elecciones y sus gustos.

Transmitiendo el valor de la lectura a los más pequeños, logramos un impacto favorable no sólo en su  desarrollo cognitivo y psicológico, además fomentamos el uso de la imaginación, la concentración, la curiosidad y, sobre todo, puede convertirse en un momento inolvidable compartido.

¡Feliz día para todos los niños!